El Daño Cerebral Adquirido (DCA) es una lesión cerebral que se produce de forma súbita causada por accidentes cerebrovasculares (ACV), traumatismos craneoencefálicos, anoxias cerebrales, tumores e infecciones cerebrales, y que puede llegar a presentar múltiples secuelas en diferentes áreas funcionales.
Así pues, estamos frente a una problemática con gran trascendencia tanto personal como familiar y social que requiere de la atención y la intervención de un equipo multidisciplinar, transdisciplinar o interdisciplinar que permitan a las personas con DCA mejorar su calidad de vida.
¿Qué es la neurorrehabilitación?
El tratamiento rehabilitador de las personas con DCA consiste en aplicar todas las medidas necesarias para prevenir las complicaciones secundarias a la lesión cerebral, preservar las estructuras y las funciones cognitivas, y conseguir alcanzar la máxima capacidad física, funcional y social para que la persona pueda reintegrarse a su medio sociofamiliar y, si es posible, al escolar o laboral, a las actividades de ocio y a las deportivas.
Dicho proceso de neurorrehabilitación se fundamenta en el concepto de plasticidad neuronal, la cual permite hacer cambios estructurales y funcionales en el cerebro, modulando así las funciones neurológicas de la persona que ha sufrido la lesión cerebral.
¿Cuáles son los objetivos de la neurorrehabilitación en DCA?
Los objetivos principales del proceso rehabilitador son los siguientes:
- Evaluar los déficits secundarios del DCA.
- Reeducar y/o compensar los déficits tanto físicos, sensoriales, cognitivos como conductuales derivados del daño cerebral.
- Prevenir y/o minimizar las complicaciones derivadas de la lesión cerebral o sus secuelas.
- Potenciar las capacidades presentes a partir de las fortalezas y debilidades de la persona.
- Favorecer la integración en el medio sociofamiliar habitual.
Importancia de la intervención precoz
Tras una lesión neuronal es indispensable que se inicie cuanto antes el tratamiento neurorrehabilitador, pues según indican varios estudios en modelos experimentales sobre recuperación neurológica después del DCA, existe un corto periodo de tiempo durante el cual el proceso de recuperación se ve especialmente favorecido con lo que la respuesta al tratamiento puede ser la óptima. Si por el contrario, se retrasa la iniciación del tratamiento es posible que exista una disminución de la reorganización cortical y se reduzcan así las posibilidades de alcanzar una adecuada recuperación funcional.
Fases del proceso de rehabilitación
Así pues, la rehabilitación debe empezar ya en el período agudo e ir adaptándose y modificándose según cada etapa evolutiva. Veamos a continuación cuáles son las diferentes fases del periodo de rehabilitación.
- Fase aguda: es el momento más próximo a la instauración del daño cerebral y generalmente, la persona se encuentra hospitalizada en unidades de vigilancia intensiva, servicios de neurocirugía o de neurología. Asimismo, se trata de una fase en la que existe un importante riesgo vital y en la que pueden aparecer complicaciones graves. Por ello, el objetivo fundamental en esta primera fase es la estabilización clínica y el tratamiento y prevención de complicaciones.
- Fase subaguda: una vez conseguida la estabilización de la persona con DCA y ya habiendo sido trasladada a una unidad de neurorrehabilitación en régimen de hospitalización, inicia la segunda fase. Durante este periodo, además de procurar los cuidados médicos y de enfermería encaminados a la prevención y tratamiento de complicaciones, se inicia el periodo de rehabilitación multidispliclipanr, interdisciplinar o transdisciplinar. El objetivo fundamental en esta fase es el de procurar el máximo nivel de autonomía y alcanzar el grado de estabilización clínica suficiente para poder seguir acometiendo el programa de rehabilitación de forma ambulatoria, finalizando de esta forma el periodo de hospitalización.
- Fase de rehabilitación ambulatoria: la tercera fase empieza cuando la persona con DCA ya no requiere de cuidados médicos o de enfermería continuados, de modo que su estado clínico puede ser abordado desde el ámbito domiciliario. En este período, la persona con DCA vive en su domicilio y acude diariamente al centro de rehabilitación ambulatoria donde recibirá el programa de rehabilitación personalizado.
Formarse en neurorrehabilitación
Dada la importancia que está adquiriendo en estos últimos años el DCA, se hace necesario la presencia de profesionales formados en el ámbito de la neurorrehabilitación que puedan responder de forma adecuada a las necesidades de rehabilitación integral de las personas que han sufrido una lesión cerebral. Por ello, desde ISEP ponemos a disposición de todos los médicos, enfermeros, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, logopedas, psicólogos y trabajadores sociales, el Máster en Neurorrehabilitación, el cual permitirá conocer los fundamentos de la neurorrehabilitación y las técnicas más punteras en el abordaje de pacientes neurológicos.