En el post de hoy queremos hablaros sobre la importancia que tiene la neuroeducación en nuestras vidas.
¿En qué consiste neuroeducación?
Con las investigaciones más recientes, aparece esta nueva disciplina que integra los conocimientos de la neurociencia, la educación y la psicología, y que aporta información muy importante sobre cómo el funcionamiento del cerebro influye en el proceso de enseñanza y aprendizaje. La neuroeducación consiste, por tanto, en aprovechar los conocimientos sobre el funcionamiento cerebral para enseñar y aprender mejor, desde una perspectiva centrada en la persona como individuo único.
¡Cada cerebro funciona de manera diferente!
Esto sucede en parte por nuestra genética pero, sobre todo, por las experiencias vividas que van configurando nuevas conexiones neuronales que son, en definitiva, aprendizajes. Desde la Neuroeducación, se pretende reconocer la diversidad en cualquier persona, conocer sus potencialidades y dificultades y trabajar desde el conocimiento del funcionamiento cerebral, para superar estas dificultades apoyándonos en la potencialidad.
¿Cómo ayudar a mejorar el desarrollo del cerebro?
Conocer la importancia del cerebro y qué aspectos influyen en su salud y desarrollo, es fundamental para aplicarlos en nosotros mismos y en los demás. Entre estos aspectos están:
Contar con modelos adecuados
Ya que desde los primeros días de vida hay evidencias de que los bebés copian las conductas de las personas adultas de referencia por la activación de las neuronas espejo.
El juego
El juego es un mecanismo natural arraigado genéticamente que despierta la curiosidad, a la vez que es placentero y nos permite adquirir capacidades imprescindibles que, durante toda la vida, nos ayudarán a desenvolvernos mejor en el mundo que nos rodea.
Practicar deporte
Practicar actividad física tiene muchas ventajas a nivel físico ya que mejora la salud y previene enfermedades, y a nivel mental por el bienestar que produce, mejora habilidades cognitivas y académicas y previene la depresión y la ansiedad.
Disfrutar del aire libre en la naturaleza
Esto sin duda relaja y mejora la atención y la memoria.
Mantener una alimentación adecuada
La alimentación adecuada tiene beneficios en la memoria, la concentración, la agilidad mental y en el estado de ánimo. Las bases de una dieta neurosaludable han de ser frutas, verduras, pescado azul, harinas integrales, limitar el azúcar y evitar las conservas.
El sueño
El sueño es muy importante porque todo lo que hemos aprendido durante el día permanece en nuestra memoria a corto plazo, y es cuando dormimos el momento en que se consolida el aprendizaje y pasa a la memoria a largo plazo.
Mantener un estado emocional positivo
Un estado emocional positivo mejora tanto el aprendizaje como la convivencia y el bienestar en todas sus dimensiones. Las emociones abren la puerta al aprendizaje y despiertan en nosotros la curiosidad, el interés y, por tanto, el foco de la atención.
Poner y respetar límites
Es necesario poner y hacer respetar los límites con amabilidad, firmeza, calma y cariño, ya que van a favorecer el desarrollo del cerebro, la convivencia y dar seguridad a los más pequeños.
El equilibrio, la empatía y la comunicación
Sin duda, van a ayudar a desarrollar de forma equilibrada nuestro cerebro emocional y racional.
Nuestro reto con la Neuroeducación
El reto está en hacer conscientes a niños/as, familias, profesionales educativos y a la sociedad en general, de la importancia del papel del cerebro en todos los aspectos de nuestras vidas (social, emocional, académico, laboral, familiar…) y dar las herramientas para superar las limitaciones desde la potencialidad. Es por ello, que en ISEP contamos con el Máster en Neuroeducación y Optimización de Capacidades, el cuál te permitirá conocer con más profundidad cómo atender a los pacientes que presentan una alteración neurocognitiva.