El 2 de abril es el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, una jornada necesaria para dar visibilidad y derribar mitos sobre el Espectro de Autismo.
Uno de los lemas para la jornada de Concienciación sobre el Trastorno del espectro autista (TEA) de este año 2022, es una cita de Temple Grandin “Soy diferente, no menos”. Todas las personas somos únicas, igual que cada persona con TEA es única y no se debe reducir a un diagnóstico, ya que esa persona tiene capacidades y habilidades que no deberían quedar encasilladas y reducidas.
Para concienciar y sensibilizar es necesaria la formación y la información a la población, con los aprendizajes se derriban los mitos y permitimos una mayor inclusión real de las personas con TEA a la sociedad.
¿Qué es el TEA?
El Trastorno del espectro autista (TEA) es un trastorno del neurodesarrollo que presenta:
- Un deterioro de la comunicación e interacción social
- Comportamientos o interés restringido o repetitivos
Es un trastorno que se diagnostica en la infancia, en algunas ocasiones se puede diagnosticar más tarde, pero ello, no significa que no hubieran síntomas cuando la persona era más pequeña. Lo que ha podido pasar en estos casos es que el requerimiento social todavía no era tan grande como para poder observar los diferentes síntomas o incluso, también, se podían dar errores de diagnóstico. De ahí, viene la importancia de formar a los profesionales de la salud, informar al profesorado de los signos de alarma para poder hacer derivaciones y que los papás hagan las revisiones médicas a sus hijos.
¿Por qué hablamos de espectro?
Hablamos de un Espectro, con una variabilidad de síntomas y de gravedad de los mismos. Esto significa que nos podemos encontrar una persona con una sintomatología TEA muy leve que podrá ser independiente en su vida diaria a personas con sintomatología más severa que necesitarán un apoyo (de diferentes grados) para promover su autonomía y bienestar.
En la mente de la sociedad, por lo general, cuando se habla de TEA se crea la imagen de dos únicos perfiles, el primero sería una persona con dificultades para relaciones, pero muy inteligente, cuando en realidad, si hablamos de altas capacidades y TEA, estamos hablando de lo que denominamos “doble excepcionalidad”, es decir, con una prevalencia muy baja, en muchas ocasiones las películas y series reflejan dicho perfil. Por otro lado, nos iríamos hacia el otro extremo, donde nos creamos una imagen de una persona muy poco funcional, con conductas agresivas, con movimientos extraños y balanceos, también reflejado en películas y series famosas. Pero tenemos que tener en cuenta que en ese abanico tan grande nos podemos encontrar muchísimos perfiles, perfiles que se deben conocer, se deben intervenir y dar los apoyos de forma personalizada, repetimos que cada persona es única, no todo sirve para todas las personas con TEA.
Mujeres con TEA
También mencionar a las mujeres con TEA, infradiagnosticadas, pasan más desapercibidas y se diagnostican menos que a los hombres, es importante darles visibilidad, suelen ser mujeres que pasan por otros diagnósticos como pueden ser el Trastorno por déficit de atención o por Trastorno depresivo, que aunque en muchas ocasiones sea comórbido, en otras es un error diagnóstico, es importante diagnosticar adecuadamente ya que, de lo contrario, pueden suponer una sobrecarga emocional difícil de gestionar.
¿Qué podemos hacer?
- Los profesionales de la salud y educación: formarse.
- Informarse, el desconocimiento crea mitos y prejuicios.
- Conocer las señales de alarma, detectar.
- Dar los apoyos necesarios a la persona con TEA.
- Uso de Sistemas Alternativos y/o Aumentativos de la comunicación (por ejemplo; uso de pictogramas para señalizar espacios públicos, libretas de comunicación individuales).
- Respetar. Respetar a las familias y a la persona con TEA.
- Dar oportunidades y descubrir el potencial de cada persona.