La mayoría de las personas se enfrentan a un duro duelo emocional tras la ruptura de una relación. La idea de fracaso y la sensación de abandono suelen ser los principales protagonistas en estos casos.
¿Cómo se trabaja en consulta el duelo emocional en pacientes que acaban de ser dejados?
Los pacientes inician el duelo haciéndose preguntas y siendo escépticos sobre sus propios pensamientos negativos. Cuando lo hacen, suelen apreciar una reducción de sus síntomas depresivos. Al sentirse fracasado podemos ayudarle con preguntas que le hagan ser objetivo y pueda observar que su situación no es la única, ni la definitiva.
¿Todas las personas que se han separado son un fracaso? ¿Puedes pensar en alguien que le hayan dejado y no se sienta así? ¿Cómo estar separado se traduce en un fracaso como persona para ti?
En el Máster en Sexología Clínica y Terapia de Parejas descubres que las fases de una ruptura son similares a las de un duelo. A veces, es incluso más doloroso. Cuando alguien muere se cierra la carpeta, pero en la ruptura la persona está ahí y sabemos que ya no quiere estar contigo.
Los pacientes pasarán por la negación, donde no aceptarán que la relación se haya terminado; el enfado, rabia e ira, en la que buscarán las razones de lo ocurrido; la negociación, donde empezarán a buscar soluciones; la tristeza y el dolor en sí, donde llorarán ese dolor. “Estoy tan triste”, “me quiero morir, ¿qué sentido tiene?”; y, por último, la aceptación, en la cual asumirán lo que ha pasado. “Esto tiene que pasar, no hay solución, no puedo luchar contra la realidad”. Algunos autores exponen también una sexta fase: la asimilación. En ella, todo está superado, asimilado, y puedes hablar de ello sin emocionarte.
Efectivamente hay un tiempo de duelo que puede durar hasta dos años pero, realmente, ese tiempo es muy relativo y personal. La clave está, sobre todo, en aceptar la situación, en reconocer que la historia ha terminado y saber poner el punto final.
Se debe trabajar en el paciente lo que le hace avivar la llama del dolor. Parar y controlar las cosas que le recuerdan a esa persona: canciones, fotos, libros, lugares, etc. Y asimismo trabajar y recomponer la autoestima dañada.
Es importante no buscar cuanto antes una pareja, ya que en ese caso estaría sustituyendo el afecto que le falta y esto le puede ocasionar cierta dependencia. El objetivo es aprender a vivir con uno mismo. Saber disfrutar y saber sentirse bien. La clave consiste en que a pesar del sufrimiento, el paciente continúe activo.
La formación en sexología clínica es indispensable para afrontar con seguridad y eficacia el trabajo terapéutico para tratar el duelo emocional.