Hoy en día, se conoce que las personas consideradas exitosas, no son necesariamente aquellas que obtienen las mejores calificaciones en la escuela. Es decir, la capacidad intelectual de una persona no es sinónimo de un óptimo desempeño personal y social, sino que existen otro tipo de competencias personales que contribuyen a este éxito.
El sistema educativo y sus prioridades
Pese a eso, parece que tanto el sistema educativo actual como la propia cultura, siguen priorizando aspectos tales como la capacidad lingüística o el razonamiento lógico-matemático; dejando de lado otro tipo de habilidades tales como la música, el movimiento de cuerpo, la reflexión…
De este modo, son muchos los niños y niñas los que acaban siendo considerados como menos competentes o con un rendimiento escolar más bajo debido únicamente a que, su modo individual de pensar, no está tenido en cuenta en el modelo de escuela actual.
Con el fin de enfatizar que no sólo se deben considerar inteligentes a aquellas personas que tienen un expediente académico brillante, sino que también lo pueden ser todos aquellos que brillan socialmente o profesionalmente, el psicólogo Howard Gardner propuso en 1983 la teoría de las inteligencias múltiples.
Dicha teoría, partió de la idea de que las potencialidades de que la inteligencia no es algo unitario, sino que agrupa diferentes inteligencias distintas e independientes, las cuales vienen determinadas por la genética de cada uno y que éstas se desarrollarán en mayor o menor medida en función del medio, las experiencias vividas o la educación recibida, entre otras.
Así pues, a partir del estudio de criterios tales como el análisis de individuos que mostraban talentos inusuales en un determinado campo; la evidencia neurológica de áreas del cerebro especializadas en ciertas capacidades (incluyendo estudios de personas con daño cerebral que afectaba a una capacidad determinada); la relevancia evolutiva de ciertas capacidades; y diversos estudios psicométricos; Gardner determinó que existían hasta 8 tipos diferentes de inteligencias.
Tipologías de inteligencias
Las 8 tipologías de inteligencias que planteó Gardner en la Teoría de las Inteligencias Múltiples fueron:
- Lingüístico-verbal: es la empleada para leer, escribir, narrar historias. Se manifiesta en la sensibilidad para entender fonemas, estructuras verbales y todo lo relacionado con el lenguaje. Algunos ejemplos de actividades lúdicas para potenciar esa inteligencia serían: realizar talleres de revistas, periódicos o radio, fomentar la lectura divertida y relatar cuentos o practicar juegos de memoria y de palabras. Los perfiles profesionales de este tipo de inteligencia más desarrollada son: escritores, periodistas, abogados, poetas, líderes políticos…
- Lógico-matemática: es la propia de quienes dominan el razonamiento, la lógica, la resolución de problemas, analizar datos, ordenar…. Para estimular esta inteligencia se pueden realizar juegos de acertijos o enigmas, desafíos lógicos, practicar el ajedrez, juegos de estrategia, puzzles o proponer maquetas en grupos. Los perfiles profesionales relacionados con este tipo de inteligencia son: economistas, ingenieros, científicos, informáticos, matemáticos o contables.
- Musical: es la habilidad para percibir, apreciar y producir-reproducir ritmos, tonos y música. Se puede hacer con los niños un musical, cantando y bailando, jugar a identificar varios tipos de sonidos con los ojos cerrados, componer canciones y ritmos. Es el perfil profesional de los músicos, compositores, cantantes e instrumentistas.
- Corporal-kinestésica: es la encargada de controlar los movimientos corporales y la habilidad para manipular objetos. Se puede trabajar mediante la organización de gymkhanas con diversos tipos de deportes y actividades lúdicas, concursos de bailes y dramatizaciones, juegos de mímicas y adivinanzas usando solo el lenguaje corporal. Los perfiles profesionales son: deportistas, actores, modelos, bailarines.
- Espacial: es una inteligencia visual que se muestra como el sentido para percibir y desarrollar relaciones tridimensionales que permiten captar con precisión el mundo que se despliega ante nuestros ojos. Todas las manualidades estimulan esta inteligencia, por ejemplo realizar collages, cuadros, mapas, construcciones en 3 dimensiones, figuras de arcilla o dibujos. Asimismo, hacer fotografías, juegos de construcción o de imaginación con los ojos cerrados lo que el otro está describiendo. Es el perfil profesional de los artistas, fotógrafos, arquitectos, diseñadores, publicitarios o decoradores, entre otros.
- Intrapersonal: es la encargada de garantizar un buen conocimiento y capacidad para comprender los sentimientos propios, reflexionando sobre sus experiencias y aprender de ellas. Se pueden aplicar técnicas de mindfulness para los niños y proponer un proyecto de blog personal para hacerles reflexionar sobre sí mismo, así como fomentar las autoevaluaciones. Este perfil puede ser de un filósofo, teólogo, líder político o religioso.
- Interpersonal: esta capacidad se manifiesta en la sensibilidad para captar y comprender a los demás, empatizando con sus sentimientos y su forma de ser. Para potenciar esta inteligencia se pueden realizar actividades que generen debates sobre temas actuales que hagan tocar la sensibilidad de los niños. El aprendizaje cooperativo y todo el tipo de juegos, especialmente los juegos de rol y juegos de mesa, estimularán las habilidades sociales y la resolución de conflictos. Los perfiles profesionales relacionados con esta inteligencia son: educadores, psicólogos, sociólogos, enfermeros, abogados, administradores…
- Naturalista: es la capacidad para organizar los elementos del mundo natural en categorías. Para estimular esta inteligencia es necesario facilitar el contacto de los niños con la naturaleza y fomentarlo por ejemplo con propuestas de elaboración de un álbum sobre algún tema, o de construcción de un herbario o una huerta. El perfil profesional ligado a ella es el de veterinario, astrónomo, biólogo o botánico.
La unión de todas las inteligencias
Cabe destacar que, aunque una persona puede destacar en un tipo de inteligencia por encima de las demás, esto no significa que no pueda tener también una alta inteligencia en alguno de los otros tipos o incluso en todos. Pues, en general, la mayoría de las actividades requieren el uso de varios tipos de inteligencia simultáneamente.
Es por ello que, la Teoría de las Inteligencias Múltiples propone una transformación en el modo de funcionar de las escuelas en la actualidad, sugiriendo que lo ideal es que los profesores estén entrenados para impartir sus lecciones de modos diversos, incluyendo música, arte, juego de roles, trabajo cooperativo, multimedia, actividades de campo, reflexión… con el fin de maximizar así el aprendizaje de todos los alumnos.
Esta información es muy interesante y sintética. Nos da una buena idea de lo que «se mueve» en ese campo. Me parece que puede complementarse con los estudios sobre diferencias individuales, sobre el nacimiento de preferencias personales en los niños, y sobre visiones de «dominio específico», especialmente desde el modelo de redescripción representacional de Annette Karmiloff-Smith.